lunes, 5 de marzo de 2018

PROBLEMAS EN LOS CRIADEROS LOS DÍAS DE LLUVIA

Todos nos alegramos de estos días de lluvia con la sequía tan seria que sufre España, necesitamos agua y necesitamos sobretodo llenar los pantanos pero hay que reconocer que en los criaderos, tras días, incluso semanas de precipitaciones en algunas latitudes empiezan a evidenciarse problemas serios.

El primer efecto evidenciado por muchos tras estos días de lluvia es la alteración del ciclo reproductivo, esto sobretodo es notorio en criaderos con sistemas de luz natural. Hemos pasado de un tiempo muy primaveral con ascenso significativo de horas de luz a unos días de oscuridad manifiesta con bajada incluso de las temperaturas. Muchos criaderos en estas situación tienen una bajada de rendimiento importante, parece como que la cría se ha congelado y es cierto, porque de alguna manera los pájaros alteran su ciclo natural. En días sueltos de lluvia no se nota en exceso pero con la situación actual de una semana seguida y con atisbos de continuar se nota.

Pero hay otro efecto todavía más grave, el riesgo de enfermedades se multiplica. Muchos criaderos ahora mismo están sufriendo brotes patológicos, por ejemplo de coccidios, por ejemplo de hongos, picos de procesos bacterianos... este es el mayor riesgo. Sobretodo porque en muchos casos hay varias enfermedades actuando con lo cuál se dificulta el diagnóstico y el tratamiento eficaz.

¿Por qué ocurre esto? Bueno, la respuesta sencilla sería decir que es culpa del aumento de humedad. Esto es innegable pero hay más factores que se suman y la combinación entre exceso de humedad, mala ventilación en muchos casos, falta de higiene y por supuesto debilidad de los reproductores por el esfuerzo de la cria, es casi casi la tormenta perfecta.

Aquí no vamos a dar la solución a los problemas, porque cada criadero afectado necesita una acción veterinaria concreta y muy estudiada pero si vamos a dar varias premisas para evitar esto.

1. ACIDIFICAR EL AGUA: Muchos criadores utilizan acidificantes en épocas de mucho calor y épocas de mucha humedad, si se suman varios días de lluvia, una prevención muy correcta y barata es acidificar el agua. El ácido propiónico y fórmico, los mejores para ello.

2. MÁS LIMPIEZA AÚN: En semanas muy húmedas hay muchos criadores que no limpian, por lo guarro que resulta pero es contraproducente, debemos limpiar más las jaulas, más si cabe cuando seguro muchas están llenas de pelos que facilitan aún más la contaminación.

3. VENTILAR: Si el agua no entra al criadero procura ventilar, conseguiremos reducir poco pero algo la humedad, es clave.

Bendita lluvia sí, pero fundamental tener esto claro, en semanas de lluvia más atención si cabe.

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